Giordano Bruno: una mente anacrónica

Las cosas ordinarias y fáciles son para el vulgo
y para la gente ordinaria. Los hombres raros,
heroicos y divinos pasan por este camino de
la dificultad con el fin de que la necesidad se
vea obligada a concederles las palmas de la inmortalidad.
Giordano Bruno
La cena de las cenizas

Giordano Bruno nace en 1548, procedente de Nola, Italia. Fue teólogo, filósofo y poeta así como propietario de una inteligencia agudísima, mente abierta y una memoria prodigiosa que despertó la curiosidad de los personajes más importantes de la Europa de su época. Desarrolló durante su juventud técnicas mnemotécnicas para ser capaz de recordar cosas con una gran eficacia. Tan notable debía de ser su habilidad que fue llamado a Roma para demostrar sus técnicas ante el Cardenal Scipione Rebiba y nada menos que el Papa, Pío V. Fue experto en filosofía aristotélica, disciplina aceptada en los círculos académicos y que enseñó con una maestría legendaria. Sus cualidades intelectuales y conocimientos, innumerables. Su "defecto", letal: ¡Herejía!

Durante su juventud ingresó a la orden de los Dominicos. ¡El sujeto lo cuestionaba todo! No aceptaba el culto a los santos ni el de la virgen María, incluso negaba la naturaleza divina de Jesús y era un asiduo lector de literaturas prohibidas por la ley eclesiástica. Una mente curiosa que no se conformaba con la Biblia. Simplemente admirable aunque las autoridades religiosas no pensaron igual.

Con el tiempo, a causa de sus ideas contradictorias con la mayor parte de los dogmas católicos, Bruno fue perseguido, sus libros quemados y destruidos en la Plaza de San Pedro e incluso fueron añadidos al famoso Index Librorum Prohibitorum, un catálogo de libros que, con unas cuantas hojeadas, te asegurabas un pase VIP al infierno. Desde mi punto de vista pertenecer a esa lista era todo un privilegio por varias razones.

A continuación algunos de los despreciables crímenes por los que la Iglesia lo declaró hereje y proscrito:

**Apoyó y divulgó la teoría del heliocentrismo de Copérnico haciéndolo público en sus conferencias y libros. (¡Crímen! Después de todo la Biblia dice que Josué hizo detenerse al Sol y no a la Tierra.)

**A diferencia de la concepción aristotélica del universo, de la cuál tenia profundos conocimientos, que afirmaba que el cielo y la tierra estaban compuestos de diferentes sustancias, Bruno creía que todo el universo estaba formado por los mismos elementos y las cosas se comportan en aquellos lugares de igual manera a cómo lo hacen en el nuestro. Se tuvieron que esperar poco más de 400 años para que Einstein publicara su teoría de la relatividad que dice que las mismas leyes físicas trabajan de igual manera en la habitación en donde estás como en el rincón más apartado del Cosmos.

**En su época se creía que el universo solo consistía en lo que se alcanzaba a ver, es decir, el sistema solar. Bruno iba más allá. Afirmaba que el Sol es solo una estrella mediocre entre una infinidad de ellas. Sostenía que el universo era infinito y que alrededor de otras estrellas había planetas girando alrededor como lo hace la Tierra con el sol e incluso era probable que estos tuvieran seres vivos en él. (Me pregunto que opiniarían quienes persiguieron a Bruno sobre el hecho de que actualmente se han encontrado cerca de 450 planetas fuera de nuestro sistema solar y nada parece indicar que se dejen de añadir más al catálogo de exoplanetas).

El 17 de febrero de 1600 la plaza romana de Campo de' Fiori veía como Giordano Bruno, despojado de sus ropas y atado a un palo… con la lengua aferrada a una prensa de madera para que no pudiese hablar… fue quemado vivo en cumplimiento de la sentencia dictada pocos días antes por el tribunal romano de la Inquisición tras un largo y tortuoso proceso de 8 años que casualmente fue precedido por el mismo juez que procesó a Galileo Galilei, Roberto Belarmino, pocos años después aunque con un desenlace menos trágico y sí más famoso. Aunque le dieron varias oportunidades de retractarse las rechazó con vehemencia, nunca besó la cruz que le ofrecieron poco antes de ser quemado pasando así a la larga lista de mártires de la iglesia católica.

Bruno fue declarado hereje, pertinaz y obstinado. Fue llevado a la hoguera a un pensador por sus opiniones religiosas, por rechazar la posición política de la religión y por efectuar una reforma teológica y cosmológica.

Giordano Bruno es arrastrado por una turba de fanáticos religiosos hacia la hoguera en el Campo de' Fiori

El legado de Giordano Bruno es vasto. La censura de la que fue víctima, por fortuna, no tuvo la eficacia que pretendieron originalmente e influenció a posteriores generaciones de científicos. Uno de los cráteres en la luna lleva su nombre y en el siglo XIX se construyó un monumento en su honor en el lugar en el que murió de forma tan reprobable, a manos de una sociedad que no estaba preparada para él.

Campo de' Fiori en la actualidad donde alguna vez una mente prodigiosa ardió al calor de la ignorancia

Al fin y al cabo, la historia le terminó concediendo merecidos aplausos.